¿Para qué sirve que le haga Masaje a mi guagua?

El masaje tiene muchos beneficios estudiados, dentro de ellos, los más conocidos son los que alivian la aparición de los cólicos, mejoran el sueño y la digestión. En la Asociación Internacional de Masaje Infantil (IAIM) establecen que los masajes: estimulan, relajan, alivian y promueven la relación de los bebés con sus padres. Me voy a detener en esta última parte, es decir ¿cómo podrían promover la relación?
La respuesta es muy sencilla, los masajes infantiles, son una forma de comunicación con tu guagua, eso significa que a través de ellos, puedes decirle muchas cosas a tu hij@ y a su vez recibirás distintos mensajes de ella o él. Cuando mejoramos la comunicación, mejoramos nuestras relaciones… ¿Cómo pasa esto?
Cuando estableces este tipo de contacto con tu guagua (el masaje), le estás diciendo por ejemplo, “que estás presente”, que estás absolutamente presente para él o ella en ese momento y que por lo tanto tu hij@ puede “contar contigo”. Cuando tu guagua recibe ese mensaje, la respuesta es sentirse inmediatamente importante y querid@ por ti y podría pensar algo como “si mi mamá (papá) está aquí haciéndome masajes, entonces yo soy una persona valiosa, importante y querid@”. Si le hacemos masajes todos los días ¡tu bebé recibirá este mensaje todos los días! ¿cómo te sentirías si todos los días recibieras este mensaje?
A su vez, esta idea, que penetra con fuerza en cuerpo y mente, se fortalece porque al realizar masajes, se libera oxitocina, una hormona que produce bienestar, amor y vínculo y que es nuestra mejor aliada cuando queremos sentirnos ¡felices y queridos! A su vez con la práctica del masaje, disminuyen los niveles de cortisol, hormona de estrés, tanto en la guagua como en quien hace el masaje, entonces existe una disposición corporal a la relajación, a conectarse, a disfrutar, entonces ¿qué mejor escenario para unirte con tu guagua que a través de un masaje? No digo que sea la única forma de obtener bienestar (afortunadamente) pero sí, es una herramienta potente que podemos aprovechar para generar placer en tu hij@ y en ti, ya que es una herramienta que funciona de manera generosa y abundante.
Al mismo tiempo, la cercanía que requiere el masaje, permite que conozcas más a tu bebé ¿qué le gusta? ¿cuál es la parte de su cuerpo más sensible? ¿dónde siente placer? ¿cuánto tiempo logra mantener su atención? En fin… hay mucha información cuando estamos cerca de nuestra guagua.
Entonces, hacer un masaje es una gran posibilidad para promover, crear y fortalecer una buena relación madre-bebé y/o padre-bebé. Para esto, es importante como adulto, estar dispuesto, entregarse al momento de complicidad, de relajo, bienestar y descubrimiento…
Te invito a tocar constantemente a tu guagua (siempre que ella quiera) y también a saber respetar su necesidad de descanso, verás cómo va recibiendo con felicidad ese tacto y cómo te lo irá pidiendo con el tiempo…
Yo he visto en mis talleres de Masaje Infantil como las madres o padres que se comprometen con la práctica cotidiana del masaje, logran vincularse con sus bebés de otra manera, estableciendo mayor conexión visual, mejorando el disfrute mutuo y complaciéndose mutuamente en una interacción respetuosa, amorosa y nutrititva.
¡Viva el Masaje!